¿Necesitas un perro guardián que también sea la bola de amor más mullida y adorable que puedas pedir? Tengo la mejor noticia para ti: ¡ese soy yo! Soy una raza guardiana -lo que significa que me encanta proteger- y mi gran cuerpo se suma a mi aspecto de perro guardián intimidante. Muestro mi lado duro cuando estoy con extraños, pero en el fondo sólo soy un cachorro dulce que ansía el amor y el cariño de todos los humanos, ¡incluso de los cachorros pequeños! También me llevo bien con otros perros, pero tiendo a hacer lo que quiero cuando tengo demasiada libertad, así que llévame con correa siempre que salgamos. Necesito hacer ejercicio como cualquier otro perro, pero no demasiado. Aprecio un buen juego de buscar o tirar de la cuerda, pero prefiero que los humanos me den un trabajo que hacer. Si me ponen fuera en un patio vallado, patrullaré durante horas. Cuando no estoy vigilando a los humanos, me encanta echarme largas siestas. Mi pelaje esponjoso me convierte en el cojín perfecto para descansar la cabeza, así que podemos dormir la siesta juntos si quieres.